sábado, 22 de noviembre de 2008

¿A DONDE IRÁN?


Después de 20 años de servicio eficaz a los jóvenes que necesitaban una segunda oportunidad para rehacer su formación, alguien ha decretado que se carga los CIP y lo está haciendo a la brava y con tortura incluida para profesores, ayuntamientos y demás responsables.

Ante la obligación de acatar una ley de rango superior, la consejería de educación del G.V. ha decidido, por su cuenta sin consultar a los interesados, sustituir los programas de garantía social -enseñanza no reglada- que se imparten en los CIP por los programas de cualificación profesional inicial -enseñanza reglada- que la última ley de educación obliga a crear como salida a los alumnos que no han terminado la ESO con éxito. De entrada puede parecer que es la misma población que estamos atendiendo en los CIP. Pero cuando se estudia el contenido y los niveles que marcan los nuevos programas lo primero que se ve es que no responde a la realidad del 95% de los alumnos que están en los CIP.

A primera vista se puede pensar que este salto dignifica la iniciación profesional porque le da rango de reglada. El problema se presenta cuando este salto es indigerible para este tipo de alumnos. Puede suponer un nuevo fracaso para un colectivo que ya ha fracasado en la enseñanza reglada y si se elimina la no reglada ¿qué se va a hacer con ellos?

De repente se dice que los Ayuntamientos ya tenemos que ir retirándonos porque todo pasa a competencia del GV. Se nos dan unos años de transición y,en ese período, se decreta que los Ayuntamientos y Mancomunidades tenemos que aplicar en los CIP el convenio de la concertada y adaptanos a su funcionamiento. Nos encontramos así de golpe y porrazo que, además del disparate jurídico y administrativo de considerar a los Ayuntamientos entidades privadas, no podemos aplicar dicho convenio porque el dinero adjudicado no se ajusta al funcionamiento de los CIP. No habían tenido en cuenta que la enseñanza concertada se da en centros grandes que abarcan todas o casi todas las etapas de la enseñanza, por lo que están dotados de un montón de recursos que nosotros ni olemos. A su vez funcionan con otros criterios y con una población estudiantil muy distinta
En su día, antes de que saliera el decreto, pasaron revista a todos los CIP para ver sus instalaciones, sus listas,las titulaciones de su profesorado... Con eso se conformaron, pero a la hora de hacer un cambio de esta envergadura nadie se puso a estudiar el funcionamieto interno y los plus de dedicación que supone la atención a este tipo de jóvenes: las tutorizaciones especiales, programas complementarios, apoyos socioeducativos... que el mismo profesorado está desarrollando. Tampoco se ha valorado las aportaciones extraordinarias, tanto económicas como humanas, que muchos Ayuntamientos están realizando para optimizar la atención a los alumnos y a sus familias.

No puedo comprender cómo se pueden tomar decisiones de este calado sin conocer previamente la realidad de los CIP y sin pedir información a los afectados. Eso sí, el departamento se ha asesorado con representantes de la concertada, así les ha salido. A fecha de hoy no sabemos aún si nos van a conceder el dinero o no, si vamos a tener que marcharnos o si va a merecer la pena seguir con los CIP.

En resumen, han entrado como elefantes en una cacharrería. Están destrozando algo que hasta ahora estaba dando buenos resultados, sin tener nada preparado para sustituirlo o para mejorarlo. Estamos en manos de un atajo de desaprensivos e incompetentes que no tienen ni un norte educativo ni un mínimo de respeto a las demás instituciones que llevan 20 años trabajando en este terreno ¿Con qué criterios se ha tomado esta decisión? ¿Qué política educativa se ha seguido para sacar del fracaso escolar a estos jóvenes? ¿Qué prioridades se han tenido en cuenta?

Y al final tendremos que volver a hablar del fracaso escolar, del abandono prematuro de la ESO, de la necesidad de crear nuevos recursos... Esperemos que haya un milagro que nos libre de esta pesadilla. Como se dice en las películas, esto no nos puede estar pasando. Creo, al menos, que no nos lo hemos merecido.

viernes, 21 de noviembre de 2008

EL DIA DEL PUEBLO GITANO


El pasado día 16 fue la fiesta del pueblo gitano. Me había invitado Kale dor Kayiko a su fiesta pero por circustancias familiares no pude ir. En mi trabajo tengo que mantener una relación un tanto chocante con varias familias gitanas. De alguna manera soy un perseguidor suyo para que sus hijos no falten a clase Esta relación no ha creado en mí ningún sentimiento de rechazo ni de desprecio como pasa en un notable espectro de población. Sí he de confesar que a veces me invade una cierta sensación de hartazgo. Uno tiene que oír un montón de veces las mismas disculpas, los mismos cuentos, el mismo teatro. Porque, eso sí, cuando les llamas a capítulo le echan un teatro... vamos que son actores por genética. Muchos de ellos no se podrán creer que, con lo perseguidor que me pongo, lo hago por un profundo respeto y por un sentimiento arraigado de educador que me hace sentirme desasosegado pensando que esos críos está quedándose sin futuro ya. Y esto significa que un sector del pueblo gitano tiene su porvenir en riesgo.


A decir verdad el absentismo ha bajado considerablemente en relación con épocas anteriores, pero aún no ha arraigado el convencimiento de que sin formación no hay perspectivas para labrarse un futuro digno ni para crear nuevas iniciativas laborales o mejorar su imagen social. Muchos padres se conforman con una formación elemental cuando no rudimentaria. Y uno tiene que oír que total ellos no saben mucho más y no les ha hecho falta... Nunca entenderé cómo un padre se pueda conformar en que su hijo o hija no le supere en conocimientos, en preparación para la vida. No son conscientes, o no quieren verlo, de que esto de la evolución social va a mil por hora.


A este respecto tenemos que escuchar últimamente el argumento demasiado socorrido de que tienen que conservar sus tradiciones, su identidad de pueblo... No creo que sea una identidad de pueblo mantenerse en la marginalidad, en la ignorancia o en rechazar los avances sociales de la sociedad actual que se ofrecen a todos por igual. El pueblo judío también conserva sus tradicones, su lengua, su religión y sus costumbres estríctas pero por eso no se han quedado anclados en el siglo XIX, sino que son punteros en muchos terrenos de la ciencia y de la economía, claro. Quizás en las asociaciones y en los cultos gitanos tendría que empezar a escucharse un tipo de discurso que haga ver que la fidelidad a la identidad de pueblo pasa por mirar más al futuro que para un sector importante de familias preveo bastante crudo si no se ponen al día.


En realidad me he puesto a escribir este artículo porque hoy he venido a casa con el estómago encogido. Entre otras cosas me he enterado de otro caso más a sumar a la lista de críos que tiene hijos o ya están embarazadas. En mi pequeño escenario de Barakaldo ya tengo contabilizados 10 u 11 casos, no quiero pensar en cuántos podrá haber por ahí. Me parece de una crueldad increíble haber permitido que unos críos de 15 ó 16 años se hayan metido en un callejón sin salida de estas dimensiones con toda la incosciencia del mundo. Las ONGs están haciendo campañas en países del Tercer Mundo para atrasar la edad de matrimonio de las niñas y aquí nos tenemos que desayunar con noticias de éstas. A quién se le puede pasar por la cabeza que en el siglo XXI puedan mantener una familia y responder de una crianza correcta de los hijos..


Esto trae consigo una consecuencias irreparables para ellos y provoca que situaciones que ya estamos viendo con impotencia se agraven. Por ejemplo, yo conozco tres casos, pero alguien me pude decir cuántas abuelas hay hoy en Bizkaia con una nube de nietos a su cargo. Consider heroicas a estas mujeres que acaban cargando con los despropósitos de su familia, pero ¿hasta cuándo van a poder aguantar esa carga? ¿Qué van a poder hacer cuando esos niños lleguen a la adolescencia?Estos menores con prerrogativas de adultos, pero con la cabeza llena de pájaros, tendrán que seguir viviendo de las ayudas públicas y de la caridad. No creo que sea desable para el futuro del pueblo gitano seguir cronificando una dependencia de este tipo que a veces resulta ya insultante. Los patriacas o responsables de culto se han preguntado por qué se dan cada vez más casos de fugas y con edad más temprana y por qué aumentan las separaciones, cosa antes casi impensable. No entiendo cómo dentro de la cultura gitana cada día se ve más falta de autoridad o menos compromiso en poner las cosas en su sitio a los hijos...


Espero que no recurran a la tan manida respuesta de "los jóvenes se están apayando". Pienso que quien se conforme a estas alturas con disculpas así tan simplonas, no ve o no quiere ver que hay otros problemas de fondo. Algo se le está yendo de las manos a un sector del pueblo gitano que, visto desde mi mirador, da la impresión de ser mayoritario, al menos en la zona que conozco.

miércoles, 19 de noviembre de 2008

Siguiendo los consejos de Fray Luis




"...la del que huye del mundanal ruido y sigue la escondida senda por donde han ido, los pocos sabios que en el mundo han sido." Bueno, aquí no tengo el huerto del que luego habla el poeta. Me conformo con la campita y unos árboles frutales. El pequeño me ha empezado a dar unas peras impresionantes y los dos viejos ciruelos nos suministran para elaborar la sabrosa mermelada "made by María".
Es curioso cómo cambia el chip cuando te sumerges en un ambiente abierto a la naturaleza: el entorno, el paso del tiempo, la relación vecinal, los paseos, el sonido del viento, el tañer de los campanos a lo lejos, la coral de aves, el abrigo del bosque... el silencio. Es sorprendente cómo puedo retomar esa experiencia íntima de que cuando se produce el silencio exterior, el interior se puebla de sonidos, recuerdos... Me sorprendo en muchos momentos rumiando, al igual que las vecinas vacas de Cinio, desde el cada día más reciente hasta escenas o vivencias que tenía por totalmente olvidadas.
Después de una vida no tan procelosa como la del poeta pero curtida en muchas batallas, me apetece parar y empezar a prepararme para una nueva etapa de mi vida en la que ir sacando conclusiones y regurjitando lo que aún llevo revuelto por dentro. El mayor lujo es poder compartir este oasis, además del bregar familiar diario, con María. La vivencia de pareja se agiganta en intensidad y en cantidad sin necesidad de grandes alaracas, a través de momentos íntimos y de rituales sencillos: desayunar al aire libre viendo amanecer y escuchando los primeros gorgogeos, los paseos al atardecer para sorprender a las cigüeñas recogiéndose en el roble seco, sentándonos a leer juntos, nadando en el pantano, descubriendo paisajes...