lunes, 25 de septiembre de 2023

El regreso de las momias


Han salido de sus tumbas políticas, cada cual con sus prebendas bien aprovechadas, para hacernos ver que las cosas tal como van no les gustan. Y nos han proclamado a los cuatro vientos -prensa, radio, televisión y redes- sus soluciones y consignas, sin pararse a pensar que los tiempos y la sociedad han cambiado pero ellas no: sus negocios y sus entornos privilegiados mantienen también sus mentes embalsamadas. Una de las momias ha provocado que su partido tenga que hacer un manifestación de Madrid, engordada con autobuses gratis desde el extrarradio, para clamar contra algo que aún no se sabe ni si será ni cómo será. Total que siguen repitiendo lo que ya decían en el siglo pasado: España se rompe, la democracia se corrompe, vamos al desastre, filoetarras, váyase...  Las otras momias se han juntado para decir que su partido se atreve a llevarles la contraria y están indignados, pidiendo la cabeza de su dirigente por segunda vez. Parece que con los resultados de la vez anterior no han tenido suficiente lección y, una vez más, hacen el caldo gordo a sus contrarios.


En efecto, el tema de la supuesta amnistía para los dirigentes independentistas catalanes levanta ampollas, sobre todo a los nacionalistas españoles sean azules o rojos. Ahora resulta que, por arte de birle y birloque, el que está reclamado por la justicia es el que va a imponer las condiciones para que la posible coalición  alternativa al PP sea posible. Este filibustero de la política también me resulta una persona repugnante por mentiroso y cara dura, que después de la farsa que montaron cuando vio las orejas al lobo, se fue de rositas, hizo que los suyos le llamaron exiliado -cuando no era más que un cagueta que no quiso dar la cara como otros de los suyos- y le estén rindiendo una incondicional cortesía. Tengo que reconocer que a mí también me fastidia que se vaya a salir con la suya.


He escuchado decir al señor Rajoy, otra de las momias participante en la manifestación de hoy, que lo único que funcionó en Cataluña fue el artículo 155. D. Mariano, por favor, no vuelva a insultar nuestra inteligencia. No nacimos ayer y no es de recibo que llame solución el fiasco que montaron, que hizo que España hiciera un ridículo espantoso a nivel internacional. Usted no quiso hacer nada y apeló a dicho artículo y a no sé qué leyes decimonónicas, así le pasó la patata caliente a los jueces y a un coronel de ultraderecha al mando de la tropa, que entró como un elefante en una cacharrería. Usted quedó también en evidencia cuando se comprobó que las legislaciones de diversos países europeos no tenían referencia de dichas leyes y así los jueces no pudieron traerse al filibustero para aplicárselas. Así que podemos aplicar aquí lo de "de aquellos polvos estos lodos". Creo que sí han funcionado las otras medidas de perdón a los dirigentes que se quedaron aquí. En realidad, los dirigentes independentistas no tenían que haber entrado en prisión, cuando se les podía aplicar otro tipo de medidas más acordes con la política, evitando el martirologio que se montó a su costa. De hecho el independentismo catalán ha perdido fuelle desde entonces. Igual van a echar de menos a Rajoy o los duros del PP que puedan asumir el poder.