domingo, 31 de diciembre de 2023

Deconstruir la Navidad

 


¿Realmente sabemos qué estamos celebrando en la Navidad? ¿Qué queda de lo que nos enseñaron a los mayores en nuestra infancia o de las costumbres que teníamos entonces? Ahora estamos perdidos en medio una mezcolanza de personajes, ritos, tradiciones de otras culturas y que todos han sido fagocitados por el "becerro de oro" al que el mundo entero rinde pleitesía y asiste asiduamente a sus disparatados rituales consumistas, camuflados bajo vistosos ropajes de paz, familia, felicidad, alegría... Todo sirve para hacernos consumir y cuanto más consumas, más vales, mejor vives, más luces ante los demás... Al niño Jesús le traen regalos los Magos de Oriente y, de paso,  Santa Claus, San Nicolás, Papá Noel, Olentzero traen regalos, principalmente para los niños. Al final esto acaba convirtiéndose en un intercambio y, claro, nadie quiere ser menos ni quedar como un miserias. La mayor parte de la gente miramos con terror al calendario porque se acerca la Navidad y acabamos medio locos pidiendo su final cuanto antes, soñando con la reanudación del curso, porque se suele acabar agotados si tenemos responsabilidades familiares


Antiguamente se consideraba una fiesta cristiana. Ahora ya ni se sabe. En su día los que escribieron esos relatos mitológicos en los evangelios no tenían intención de hacer historia, sino de avisarnos de la importancia de la vida, de los hechos y de la doctrina del protagonista, porque iba a ser el mesías salvador -un personaje portentoso cuya venida esperaban los judíos de aquel entonces-. Algunos siglos después de que fueran escritos, el cristianismo tuvo la desgracia de convertirse, por decreto imperial de Constantino, en la religión oficial del imperio romano y se convirtió en cristiandad, porque era obligatorio acatarla. Claro los evangelistas no tenían la culpa de que en la posteridad se tomara al pie de la letra lo que escribieron y que era obligatorio creerlos como hechos que se habían dado realmente.

En la extensa geografía del imperio, el cristianismo se fue encontrando con los ritos o festejos propios del solsticio de invierno: el mito del árbol con sus personajes en los países nórdicos, eslavos o con las fiestas familiares de los romanos. Todos ellos fueron quedando debidamente bautizados bajo la celebración de tan importante nacimiento, aunque, en realidad, en sus fiestas se mantuvieron las costumbres ancestrales: los regalos misteriosos y los encuentros familiares y es lo que nos ha llegado hasta nuestros días, con las variantes particulares de cada zona. 

En ese contexto de bondades, es propio de estas fechas navideñas que se hagan colectas de apoyo a las asociaciones que se dedican a ayudar a gente necesitada, que se multipliquen los llamados a la paz y a la convivencia, que se intente hacer visibles a los colectivos más desfavorecidos, a ser acogedores con los inmigrantes, de intentar acompañar a personas que soportan soledades no deseadas... Vamos, que parece penoso, para la gente de bien, que alguien tenga que pasar estas celebraciones solo o sola. Debajo de estos buenos sentimientos, o mejores deseos, que para un sector de población no dejan de ser ñoñeces, hay un trasfondo válido. Los valores y derechos humanos proclamados por Jesús de Nazaret, y luego transmitidos por sus discípulos, pueden ser tan válidos para ateos como para creyentes de cualquier religión. 


Es este sustrato lo más importante de la Navidad, porque ésta lo hace aflorar de una forma especial aunque sea una vez al año. El problema que se nos plantea ahora, es que los medios para su celebración se han convertido en fines y eso está conduciendo a una perversión  de estas fiestas, que podrían ser entrañables y sanadoras para la sociedad y para las familias. Sin embargo, llevan camino de acabar siendo desquiciantes y fuente de situaciones absurdas, de las que resulta fácil quejarse o criticar, pero que seguimos cometiendo el mismo error de repetirlas y de favorecerlas, cada vez con más fuerza.


lunes, 25 de diciembre de 2023

Belén sin Navidad

 

Postal de mi amigo Germán Payo humorista

Hace 34 siglos el pueblo hebreo, según nos informa la Biblia, decidió apoderarse de las tierras de Caná, porque eran el pueblo de Dios, y Yahveh se las había adjudicado por ser "la tierra prometida". El resto de la historia nos suena a un ir venir de exilios y restauraciones del reino, a golpe de profecías y de resistir a las influencias de otras culturas porque eran politeístas. La última restauración tiene la misma edad que yo: 1948 estado de Israel. Creo que fue un apaño de las potencias vencedoras de la segunda guerra mundial para dar una respuesta a la masacre sufrida por el nacismo y, por qué no, para acallar la mala conciencia de los históricos pogromos que tuvieron que sufrir por gran parte de Europa y del antisemitismo tan impregnado desde siglos de apartheid en guetos en las sociedades occidentales. Ahora treinta siglos después estamos en las mismas, solo que en vez de estar en una zona caliente de conflictos, como siempre se la ha conocido, ya ha subido a categoría de volcán, provocado por una actuación de Hamas sin valorar las consecuencias y por la erupción de los ultraortodoxos judíos asentados en el gobierno actual, que está arrasando al pueblo palestino.


Si eso mismo lo hubiese hecho Irán, por poner un caso, se le hubiese echado encima más de medio mundo. Con esto quiero decir que el estado de Israel goza de impunidad total ante la ONU y ante el resto del mundo, incluidos los países árabes que se conforman con hacer de mediadores, si es que eso arregla algo. Se salta resoluciones, fronteras, leyes internacionales, leyes de guerra, echan a gente de sus casas, les atropellan sus derechos y siempre sacan su paraguas protector, léase USA, para que nadie les impida seguir a lo suyo. Tienen el morro de mantener el argumento que lo hacen en orden a mantener su seguridad. Esperemos que esos planes de seguridad no consistan en aniquilar a todos los palestinos y en convertir su territorio en otro desierto de ruinas inhabitable, que es lo que parece por el camino que van, así se acaba para siempre con Hamás. De la misma, decretan que los dirigentes o gobiernos que les llevan la contraria, o que simplemente les sugieren que no maten de hambre a la población civil, son pro terroristas que favorecen a Hamas y, si se cabrean, rompen sus relaciones diplomáticas por haber osado meterse con ellos.


Este genocidio sistemático y consentido es uno de esos hechos actuales que están consiguiendo mantenerme el estómago permanentemente alterado con una sensación de indignación y de impotencia que me lo atenazan. Los únicos que están que no se lo creen de júbilo serán los fabricantes de armas, a los que los cantos y las oraciones por la paz -papa Francisco incluido-, típicos de Navidad, se la traen al pairo. Para completar el lío los de Yemen, que se dicen hermanos de los de Hamas, se lían a atacar barcos en el estrecho que da al canal de Suez, para fastidiar a Israel y resulta que lo que van a conseguir es que se nos vuelvan a subir los precios a todos. O sea que sin mover un dedo estamos de nuevo metidos en otra guerra por las consecuencias que nos tocan. Solución la OTAN pone en marcha fuerzas navales para controlarles, pero a los causantes del desastre nadie se atreve a ponerles en su sitio ¡Qué mundo, Dios mío! Y nosotros de Navidad. Lo dicho: no hay Navidad sin Belén pero hoy Belén está sin Navidad y tienen para rato.


martes, 19 de diciembre de 2023

El milagro de acertar


 El lunes 18 determinamos realizar la ruta maldita que no se había conseguido concluir en dos ocasiones. Pues en ésta a punto estuvimos de repetir la hazaña. Decía mi abuelo Pepe que los gitanos no quieren a los hijos con buenos principios, y mira por dónde aquí se ha cumplido. Porque principio más loco que éste no se había dado en mi historia de senderista: el guía va y pone mal la hora de quedada, los autobuses andaban con retraso y se utilizaron tres líneas 36,38 y 41 más -cielo santo- el coche del causante del lío. Sin embargo, se consiguió subir en el funi de las 9,30, que era la intención inicial. El día estuvo que ni contratado, porque a pesar del frío matutino en cuanto subió el sol y pusimos en marcha las piernas hubo que empezar a quitarse capas de la cebolla.


    Iniciamos la marcha desde Larreineta. Paramos para el tentenpié en Peñas Negras, aún a sabiendas de que el centro estaba cerrado. Antes de reanudar el camino hicimos la primera foto de grupo, comenzando a seguir las balizas rojas. A poco de empezar nos desviamos un poco por las verdes para hacer un bucle que nos permitiera contemplar el hueco y los restos minerales de la mina Picui. Gran parte del grupo no la conocía y se hicieron gran cantidad de fotos, aprovechando también la hierba escarchada del suelo, que completaba el espectáculo. Por primera vez se hicieron fotos separadas de hombres y mujeres, porque, después de las últimas incorporaciones, los varones ya no somos tan minoritarios. 

    Atravesamos la campa Picui, que no es otra cosa que el terreno con el que se tapó el agujero de la mina, hasta llegar al cementerio. Allí pudimos contemplar que las vacas tienen mirada de tontas pero de eso no tienen ni un pelo. Llegó un todoterreno con carromato incluido y salieron corriendo desde los diversos rincones donde estaban mugiendo como locas. Claro, habían identificado el vehículo del dueño que traía el condumio especial, y es que a ningún tonto le amarga un dulce.


    Después de comprobar el lugar donde se había producido aquel famoso y funesto desvío, algunos estuvimos contemplando el enorme agujero que ha quedado de la mina de Arnabal y el plano inclinado. Y allí comenzamos la subida al llamado Pirulí del Mendibil, aunque para algunas acabó siendo la subida al Calvario. Llegados a los mojones que marcan los límites municipales, giramos a la izquierda y paramos para reagruparnos y que tomasen resuello los rezagados. La mayor parte optó por reclamar otra foto de grupo con el pirulí de fondo, por aquello de testimoniar nuestra presencia allí.

    A continuación nos encontramos con un paso bastante complicado. Una pequeña vaguada totalmente encharcada y seguido un repechón de desnivel superior al 10%, pero este grupo no se arredra por cualquier cosa y todos pasamos con más o menos apuros. En lo alto nos desviamos a la derecha para contemplar el panorama increíble de una cima pequeña, que gracias a la foto de Txelo hemos aprendido su nombre, Bitarratxu. A esas hora del mediodía ya no quedaba nieblina y el espectáculo fue un banquete panorámico: los montes lejanos. Bilbao, Barakaldo como en una maqueta, la margen derecha, el Abra, el aeropuerto, el faro de Gorliz, gran parte de la zona minera... Se podía comprobar perfectamente cómo estamos estructurados según el cauce de la ría. 


    Luego ya solo quedaba bajar a Larreineta, pero ya no seguimos las balizas rojas porque la bajada del pinar señalado por éstas no está en buenas condiciones. Así que, suave suave, terminamos el recorrido por la carretera. Nos esperamos en el lavadero de Barrio Nuevo y allí informamos al personal nuevo de la antigua costumbre  de celebrar la despedida del año con una pequeña fiesta o chufla después de hacer un pequeño recorrido. Como hay que contar con el permiso del tiempo, se hará la convocatoria según AEMET nos vaya informando. Al llegar, unos pocos, menos de los habituales, siguieron hacia La Arboleda para la comida y el resto al funicular. Eso sí, nada más llegar a abajo hay que salir corriendo al bus, que ya suele estar calentando motores, para no quedarse en tierra. Bueno, todos no una pareja tuvo que recuperar cierto vehículo. Gafe superado y una gozada de jornada.


jueves, 14 de diciembre de 2023

Un día de senderismo y convivencia (3)

 


El miércoles día 13 de diciembre nos reunimos senderistas de los tres grupos para la jornada de convivencia global por aquello de celebrar las fiestas navideñas dentro de nuestro pequeño mundo de senderismo. Estábamos apuntadas 64 personas para celebrar el evento en El Regato. Quedamos en dos puntos para completar el recorrido juntos: a las 9 partimos de Bide Onera -escondiéndonos del viento- y a las 9'30 nos esperaban en el cruce de Retuerto los de Cruces, Zuazo y alrededores. De víspera se desapuntaron varias personas, pero nos dio tiempo para avisar al restaurante y actualizar los menús. Tras unos pequeños titubeos que si por aquí, que si por allá, tomamos el sendero de Gorostiza que hace el recorrido por la parte del boscosa.


Tal como se había portado el tiempo el día anterior, nos temíamos que nos iba a caer el diluvio, pero tuvimos suerte porque solo fueron pequeños chaparrones intermitentes que no interfirieron mucho en la marcha. Eso sí, según llegábamos a la plaza nos cobijábamos en el pórtico. A partir de aquí nos dividimos en dos grupos para asistir a la visita guiada que nos ofreció el personal del CIHMA. A pesar de que éramos muchos supimos aprovechar bien los espacios y atender a las explicaciones de la guía sin atropellarnos. 


En la exposición temporal pudimos disfrutar de las fotografías de la primera fotógrafa vasca, Eulalia Abaitua, realizadas en los primeros años del siglo pasado. Pensando que las herramientas fotográficas de aquella época tenían muy poco que ver con el desarrollo de las actuales, resultaba llamativo, a primera vista, la calidad de las mismas, el manejo de la luz y el enfoque de los personajes. En su contenido resaltaba perfectamente el contraste entre el mundo rural del momento y el urbano, aprovechando juntar en algunas fotos a familiares de caserío y a jóvenes que habían ido a servir a la ciudad -muy cotizadas en su época por la burguesía-, vestidas a modo urbano. Me impresionó profundamente comprobar la pobreza y la vida dura de los caseríos de entonces, sobre todo para las mujeres. Así que lo de los vestidos y el folclore de aldeanitos y aldeanitas tienen más que ver con una idealización que con la realidad pura y dura reflejada en las fotos: las vestimentas, las arrugas, las miradas, las manos destrozadas, el calzado...


En el piso superior pudimos disfrutar de la exposición permanente y de una prolija explicación histórica de Barakaldo, desde la formación de los montes de hierro hasta nuestro días. Pudimos observar documentos curiosos, como cuándo apareció escrito por primera vez el nombre de nuestra anteiglesia, la carta de la fundación de la misma o la de su adhesión al Señorío de Bizkaia. Así que en la medida en que unos terminaban de ver las fotos y otros iban bajando de las explicaciones históricas, se nos hizo la hora de comer y fuimos desfilando hasta el Birika -pulmón, en euskera-, que es el nombre actual del antiguo, que la mayor parte de nosotros ha conocido por mor de bodas, comuniones, comidas de empresa o similares. Un poco apretaditos, pero entramos todos.


Comenzamos con un sonoro brindis en el que recordamos a Patricia que ya se está recuperando de una operación muy delicada y le mandamos nuestro entusiasmo para que se recupere cuanto antes. No faltó el detalle de cantarle a Lucía el cumpleaños feliz en el día de su onomástica. La comida siguió sin incidentes y se fue cerrando entre cantos iniciados por los entusiastas de siempre, que poco a poco nos fueron contagiando a todos con el canto de los cumpleaños por meses. Al final solo un pequeño grupo permaneció sentado, por lo que pudimos comprobar atónitos que había algunos que "habían nacido vestidos". Luego, mientras nos afanábamos en ajustar las cuentas, el personal fue pidiendo cafés y copas por su cuenta, siguieron lloviendo las fotos y algunas comenzaron a salir corriendo para no perder el Kbus. Cuando quisimos hacer la foto final de grupo se puso a llover y allí en la terraza cubierta de la entrada nos embuchamos todos como buenamente pudimos. La responsable del restaurante nos sacó la foto de aquellas trazas como pudo  y Elena ha protestado, a posteriori, por no sé qué de color rojo -es lo suyo-.

Creo que el mejor recuerdo que nos puede quedar de esta jornada, que titulo de "convivencia y senderismo", es el ambiente distenso y amistoso, lleno de buen humor y de reconocimiento de las nuevas  incorporaciones. Y es que demostramos que con un sencillo paseo y una comida sin complicaciones -eso sí, lo del crianza de Rioja Alavesa fue un puntazo-, somos capaces de disfrutar de una jornada divertida y estupenda, de las que dan más valor al programa de senderismo y que, por qué no decirlo, que nos viene de maravilla pasarlo bien y ampliar las amistades más allá de las de cada grupo habitual. Enhorabuena a todos y todas por haber conseguido un día tan estupendo. Nos vemos en Santa Águeda, a ver si superamos el nivel de nuestro coro.




martes, 12 de diciembre de 2023

Vaya inutilidad de montaje

 


   Hemos estado pendientes a través de los medios de comunicación de la gran cumbre sobre el cambio climático. Todos esperábamos que, aunque no se llegase a acuerdos sustanciales, no sería tan vacía en resultados como alguna de las anteriores. Pero ya desde su constitución nos dimos cuenta de que aquello iba a ser un montaje para decir que se va a hacer algo, y al final no hacer nada. En primer lugar se celebra en Dubai, que debe su riqueza a la explotación petrolífera. Para seguir, Estados Unidos, China e India, que son los tres países más contaminantes, ni se toman la molestia de acudir. 



En el colmo del cinismo USA va a destinar una millonada para financiar mediadas correctoras de las emisiones a países del tercer mundo, vaya tela. A todo esto los europeos en general se quedan como una panda de pardillos con grandes propuestas que otros no quieren ni escuchar. O sea que aquí peleando por el reciclaje, por el control de emisiones, por los vehículos eléctricos, por la huella medioambiental... y al final nos van a sacar un comunicado del tipo "que ya... que bueno... que habrá que ir prescindiendo de los combustibles fósiles, cada productor en cuanto le sea posible". A ver cómo vamos a inculcar a la nuevas generaciones la importancia de los ODS, cuando los grandes magnates y las grandes potencias se abanican con ellos.

   
Este despropósito me trae a la memoria aquel pasaje bíblico en que los israelitas se fabrican un becerro de oro y proclaman que ese sería su dios. Y Moisés, hala, monte arriba otra vez para aplacar la ira de Yahveh. Pero resulta que Dios ni se iba a tomar la molestia de castigarles, sino que iba a dejarles que siguieran en su obstinación, porque en ella se iban a encontrar con el peor de sus castigos, su exterminio. 
En estos momentos hay miles de moisés clamando por la salvación del planeta, mostrando los glaciares derretidos, los mares descongelados, los grandes ciclones, las duras sequías, los catastróficos incendios, las estaciones trastocadas... Todo en balde. Los grandes adoradores del becerro de oro siguen sin obedecer las leyes de Dios, que no son otra cosa que las leyes de la naturaleza, que mantienen el equilibrio vital necesario para la existencia de la Tierra. Una vez más, nos acaban de dar señales inequívocas de que van a seguir en su obstinación. El problema es que en esta ocasión el castigo nos va a afectar a toda la humanidad, empezando por aquellas zonas o naciones con recursos más limitados, o que tienen menos parte de culpa del desastre.

    Un conocido mío mejicano me enseñó un refrán de su tierra que, aunque un tanto grosero, viene muy bien a cuento al final de esta cumbre: "Tanto pedo, tanto pedo pa cagar agüita". Y es que resulta muy difícil seguir convencido de que, visto lo visto, merezca la pena tomar partido por los moisés que en el día a día siguen empeñados en aportar sus pequeñas acciones para, entre todos, poder salvar algo, dentro de lo que cabe. Si hay una cosa que me da un miedo tremendo en eso de seguir cumpliendo años, es que, antes de que me llegue la muerte, tenga que estar contemplando catástrofes cada vez más descomunales. Pero, mientras tanto, no hay otra y en ese empeño estamos y estaremos.


domingo, 10 de diciembre de 2023

Lunes de senderismo 21

 


El lunes 4 de diciembre hicimos la ruta entre Zalla y Balmaseda. Previamente teníamos previsto hacer la ruta de Martiartu pero se desestimó por problemas de charcas y de tramos en condiciones peligrosas por riesgo de caídas. Ha sido un día de record: 26 participantes -el máximo fue 25 hace tiempo- y también en la gran cantidad de fotos, incluidos dos vídeos que nos han sorprendido gratamente. Llegamos todos y todas sin problemas a tiempo al autobús. Al contrario de lo esperado por las previsiones negativas del tiempo, resultó ser una jornada agradable sin viento y solo en unas pocas ocasiones tuvimos que abrir el paraguas. El río Cadagua fue un espectáculo constante -visual y sonoro- por la cantidad de agua que bajaba y por las diversas imágenes que formaba con las caídas de las presas y los remolinos de los rápidos. De ellos han dado testimonio numerosas fotos. También nos llamaron la atención algunos torrentes en la primera parte del camino.

 A poco de empezar la marcha llamé la atención sobre la vista del castro de Bolunburu y se quedó en que, para curiosos de la historia y con fuerzas para subir, se programaría la visita a esos restos prehistóricos. Sin contratiempos y con la mayor tranquilidad del mundo fue transcurriendo el recorrido. Tuvimos la oportunidad de poder contemplar por dentro la hermosa ermita de S. Antonio, aprovechando que estaba abierta por obras y el trabajador estaba fuera. También nos sorprendió la obra del palacio de los Urrutia del que solo se veía la fachada porque estaban en plena restauración de la misma sujetando el vano de las ventanas. Los rapidillos pasaron por delante sin hacerles caso, qué le vamos a hacer.


Antes de llegar al habitual cobijo para el hamaiketako, nos llevamos una gratísima sorpresa al acceder a la carretera de La Herrera: nos encontrarnos con un amplio bidegorri, donde antaño debíamos ir en fila india, que nos facilitó la llegada al paso de peatones que da acceso a la parroquia de ese barrio. Esta vez no pudimos ver las actividades exteriores de la chiquillería en los terrenos de la simpática escuela adyacente. Después del aprovisionamiento, se pasó lista para tomar nota del centro de mayores de cada cual y no podía faltar la foto de rigor para todo el grupo. Aquí también se pasó lista para saber quiénes se iban a quedar a comer y retomamos la marcha dejando al lado la torre de Terreros. Un grupo nos quedamos haciendo otra foto tradicional de este recorrido en un puentecito pintoresco, que ya va a convertirse en un icono de nuestro grupo. 


Llegados a Balmaseda nos dedicamos a hacer un recorrido turístico por la villa. Antes de entrar en la iglesia parroquial nos encontramos con la habitual concentración de jubilados en el pórtico del ayuntamiento, por si nos habíamos olvidado de qué iba el asunto. Estuvimos los interesados e interesadas contemplando el interior y las vidrieras, de lo que dan fe algunas fotografías. También aquí estaban de obras. Siguiendo el paseo fuimos al reloj de sol, con la mala suerte de que en esos momentos estaba nublado y, para remate, lo habían vallado. El final del paseo lo marcó la subida al puente medieval, insignia de la villa encartada. Allí nos hicimos la foto de despedida: los que iban a comer bajaron por el lado del frontón y los que nos íbamos volvimos por donde habíamos subido: doce por una lado y catorce por otro. Unos minutos de indecisión fueron los culpables de que viéramos salir delante de nuestras narices el bus que nos hubiera llevado hasta Cruces. Tras la media hora de rigor cogimos el que nos dejó en la intermodal. Algo tengo entendido que en la comida igual pasaron algo de frío, pero en las fotos han salido bien.



jueves, 30 de noviembre de 2023

Otoño en estado puro

 


Fue el lunes 27 en una de esas salidas de nuestros "Sanqueremos", pero no he tenido tiempo de sentarme en el ordenador hasta hoy, por aquello de que los jubilamos tenemos todo el tiempo del mundo. Pues eso, fue una jornada envuelta por un otoño en estado puro, como hacía tiempo no habíamos tenido: ni frío ni calor, lluvia suave a ratos intensa, el viento en calma, la bruma poniendo barbas de algodón a los montes, la vegetación de los barrancos por donde discurre la vía con sus colores otoñales en todo su esplendor y el sonsonete del agua que discurría por ellos.

Fue Nieves quien nos invitó a ese paseo. Salimos puntuales y nos encontramos en Mercadona de Kareaga con la gente de Cruces y de Zuazo. Seguimos hasta Ugarte donde estaba el único paso incómodo por carretera y luego subimos la pendiente que da acceso al aparcamiento del bidegorri. Lo había programado así para evitar el desagradable y peligroso paso de los túneles de la Orconera, aunque algunos protestaron porque la subidita les costó lo suyo. Ya en la vía, a poco de comenzar la ruta nos regalaron con su presencia un par de pavos reales. Uno nos miraba desde el tejado de su refugio hasta que alguien le echó migas y dio cuenta de ellas en un santiamén. El otro resultó ser un escapista que se estaba pavoneando, nunca mejor dicho, por el medio del camino hasta que algunos le fueron asustando para que volviese a su redil, pero ni con esas, que allí siguió con su paseo.


El condumio lo pudimos hacer a refugio en el túnel anejo al área de descanso. En ella precisamente nos pudimos hacer las foto de grupo, sin paraguas -Enedina manda-, porque la lluvia nos concedió una de las treguas que estábamos disfrutando a lo largo de la mañana. La ruta siguió sin más incidentes hasta llegar a la subida final de acceso a la parte de Ortuella. Arriba hicimos parada para esperar a los esforzados que necesitaban más tiempo. El tramo de bajada a Gallarta también resultó incómodo porque, puñetera casualidad. no pararon de pasar camiones. Llegamos con tiempo suficiente para coger el bus de Muskiz que estaba a punto de llegar y, entre tanto, algunos y algunas aprovecharon a hacerse las últimas fotos entre las letras del letrero de bienvenida al municipio.

Por fin, tuvimos el gusto de conocer y de acoger en el grupo a Iñaki y a Miren, los últimos senderistas que quedaban por incorporarse. Ocho personas se quedaron a comer en Trapagaran y los demás a casita. Hasta el lunes próximo que parece que también va estar pasado por agua, como le corresponde a esta época del año.

¡Qué tiempos aquellos! Y ahora...


miércoles, 22 de noviembre de 2023

Lunes de senderismo 20

 


El lunes 20 de noviembre tuvimos la jornada correspondiente de senderismo con muchas novedades. Participaron por primera vez cuatro nuevos componentes del grupo tras su incorporación a las listas oficiales. Esperamos que se hayan sentido cómodos y bien acogidos y acogidas, por nuestra parte les aseguramos que ya son uno o una más. Estrené mi nueva temporada, recuperado de mi lesión, que espero sea larga y feliz por disfrutar de vuestra compañía. También estrenamos un recorrido nuevo, aunque algunas ya lo había hecho por partes. En esas ocasiones llegamos a la conclusión de que ambos recorridos quedaban cortos, así que juntando Lekubaso y Lemoa quedó uno más completo. La última novedad fue que contamos con la compañía de dos senderistas del grupo de los martes que se apuntaron para conocer en vivo y en directo el recorrido y poder guiar a su grupo.

El pronóstico del tiempo no era muy halagüeño, pero aún así estábamos 25 personas dispuestas a todo. No fue tan fiero el león como lo pintaban, aunque en algún momento sí arreció la lluvia. De todos modos, lo peor del día no fue el tiempo, sino un desgraciado accidente que nos dejó muy preocupados. Nuestra compañera Mari Valverde sufrió una caída en las escaleras del metro que dieron con ella en urgencias de Cruces, menos mal que iba acompañada de Bego Rivas. Ha ido recibiendo expresiones de cariño a través del wahst app del grupo y esperamos tenerla entre nosotros de nuevo en las próximas salidas.

Llegamos a Bolueta con el tiempo previsto, pero, para mi sorpresa, nos encontramos con el bus de Galdakao en la parada y con pinta de que iba a ponerse en marcha. Alguien corrió para pedir a la conductora que esperase al grupo. Total que, como me explicó el que viajó a mi lado, ese bus había llegado con retraso por el tráfico y ya tenía que haber salido antes de que llegáramos. Así que entre el cabreo que llevaba la conductora, que le hacía dar trincones y maniobras bruscas, y que era la línea que llega al hospital por lo que su recorrido es más largo y con más paradas, algunas llegaron algo mareadas. El que pretendíamos coger a las 9:20 solo llega hasta Galdakao y hace un tramo por la autopista.


El primer tramo del paseo estuvo bastante respetado por el tiempo. Señalamos como interesante el puente medieval que fue del reino de Navarra y enseguida nos presentamos en Usansolo. Llegamos al área de Lekubaso con el tiempo adecuado para hacer el hamaiketako. Nos acomodamos en buena hora en los dos espacios cubiertos porque, entre bromas y veras, cayó una buena chaparrada. A algunos les pilló fuera de cubierto porque andaban a la búsqueda de unos bastones despistados. Al final el tiempo nos permitió que Enedi nos hiciera la foto de grupo antes de reanudar la marcha. A poco de comenzar hubo recolección de unas espectaculares galampernas que luego pudimos contemplar en la fotografía que Lucía nos compartió.

La cantera que las nubes no nos dejaron ver
El trayecto hasta Lemoa se hizo sin mayor incidencia, a parte de que nos llovió más que en el resto del día. Tuvimos suerte porque la mayor parte de los caminos por los que discurre este trayecto resultaron muy adecuados para un día de lluvia por el firme y por la ausencia de barro o de charcos. Una vez en la meta del recorrido, fueron siete personas las que se quedaron a comer. El resto, excepto una que optó por volver desde Usansolo, nos dirigimos a la estación de Euskotren que está situada detrás de la factoría cementera, justo al salir del paso soterrado. Negra la suerte nuestra que vimos impotentes cómo el tren arrancaba delante de nuestras narices sin poder llegar a la estación. De todos modos en una hora estábamos en Barakaldo por lo que no resultó un viaje pesado. 


El paseo fue transcurriendo por unas zonas campestres sumidas en un ambiente totalmente otoñal que cobraba cierta magia envuelto en la bruma. El poco tramo urbano que tuvimos que recorrer no nos causó ninguna molestia. Así que pudimos disfrutar de descubrir nuevos territorios de la Bizkaia poco conocida para muchos y que ya pasarán a ser parte del archivo oficial de salidas. Salud y hasta la próxima salida.

viernes, 17 de noviembre de 2023

Agustín Ibarrola oroimenez.


Hoy hemos recibido la triste noticia de la muerte de Agustín Ibarrola. Sus obras seguirán presentes entre nosotros y, en especial, en nuestro pueblo de Barakaldo. Sus chimeneas de la plaza Bide Onera serán una última firma suya para que las nuevas generaciones no olviden el origen obrero de este pueblo. Para muchos de nuestra generación fue un artista emblemático que ayudó a plasmar en sus imágenes las inquietudes por el cambio social y las luchas obreras y antifranquistas. Sus dibujos, sus grabados y sus actuaciones en medio abierto son una herencia de la que podemos seguir disfrutando todos.


Agustín fue una persona coherente con sus ideas y sus opciones. Tuvo que sufrir persecución en los tiempos oscuros del franquismo y luego la incomprensión de no pocas instituciones que le miraron más por su ideas que por su arte. El colmo de su historia fue encontrarse, como otros tantos, que después de librarse del dictador se toparon con los intransigentes y los violentos que boicotearon sus obras y emprendieron diversas campañas de desprestigio. No consintieron que no fuese nacionalista y que se revelase contra la violencia de ETA. No tuvo ningún sentido el acoso de la Diputación y la destrucción de su bosque de Oma por parte de unos vándalos, aunque tuvo las agallas para seguir manteniéndolo vivo. Aquí en Barakaldo también tuvimos que soportar grafitis insultantes y manchones de pintura en su obra de las chimeneas.


Para mí fue un artista referente por su sencillez, muy lejos del engreimiento de muchos, por su coherencia en apoyar la causa obrera y por su  independencia en su estilo artístico sin que nadie se pueda apropiar de sus ideas. Las pasó canutas para salir adelante con períodos de serias carencias económicas, pero aún así siguió firme en sus principios. Me siento orgulloso y agradecido por que esta tierra dé a luz hombres auténticos y referentes como él. Todo un ejemplo humano y artístico. Goian bego.



viernes, 10 de noviembre de 2023

Las hordas falangistas vuelven

 


Feijó, Ayuso y todo el PP en pleno han calentado el ambiente con un discurso y unos relatos delirantes, más propios de la ultraderecha que de un partido de centro de corte europeo. Cómo se puede admitir que la presidenta de Madrid reclame la intervención del rey y de las fuerzas armadas. A mí también me está costando tragar este sapo y no por las razones que hacen rugir al nacionalismo español, sino porque un filibustero de la política y sus monaguillos que mintieron descaradamente a su pueblo, con lo que provocó una inestabilidad que le ha salido cara sobre todo a Cataluña, y ahora se va de rositas y pone condiciones. Si el PP quiere que se le considere un partido centrado y democrático de corte europeo, tiene el parlamento, el senado, las presidencias de las autonomías para hacer política, incluso puede recurrir a esa caterva de jueces y fiscales que le deben la poltrona. No me parece de recibo que se dedique a agitar la calle y provocar un ambiente de acoso y derribo por la única razón de que su líder está desesperado por no poder gobernar habiendo ganado las elecciones. 


Eso sí, en ese caldo de cultivo Abascal ha levantado la tapadera de la alcantarilla de las cloacas franquistas y han salido a la calle atacando sedes, insultando a representantes públicos y armando disturbios. Para mí el problema no es tanto el ruido que están armando los descerebrados de turno que solo saben romper y agredir. Por si fuera poco ahora cuentan con el alta voz de los medios de comunicación que reducen el problema a lo escandaloso. El problema está en el coro de fondo: banderas franquistas, el Cara al Sol, escuchar la palabra alzamiento, el saludo falangista... Estos son los que están dispuestos a ir a la cárcel -en palabras de Abascal- para salvar la unidad de la patria. Tanto ellos como el PP lo que están haciendo es romperla de nuevo porque volvemos a las dos Españas de la historia y aquello acabó imponiéndose por las armas. Espero que esta vez, aunque no se llegue tan lejos, no se vuelva a crear una división tan profunda como la que tuvieron que sufrir nuestros padres y abuelos. "Españolito que vienes al mundo, te guarde Dios, que una de las dos Españas ha de helarte el corazón" lo dijo el poeta en momentos revueltos y ahora nos están abocando a lo mismo. Vivir para ver.

lunes, 30 de octubre de 2023

Un día de convivencia y senderismo (2)

 El pasado día 25 de octubre los tres grupos de senderistas de los centros de mayores de Barakaldo tuvimos la excusión anual de convivencia en la que el ayuntamiento se hace cargo del coste de los autobuses. Además, en esta ocasión nos sorprendió con un par de regalos del gusto de la mayoría del personal. En este curso hemos superado la barrera de los 65 participantes y hemos tenido que flotar dos autobuses para dar cabida a los y las 80 participantes. Ello ha sido debido a la presencia del tercer grupo de los lunes y a los y las pertenecientes a la lista de espera para entrar en el programa.


El destino elegido fue el Nacedero del río Urederra en el valle de las Amescoas, en la cara sur del macizo de Urbasa. En la víspera nos llevamos un pequeño disgusto al ser informados de que había obras en un tramo por lo que no se podía visitar el primer pozo, pero no nos arredramos y allí estuvimos como un solo hombre en la parada de Landeta a coger nuestro ticket para el asiento correspondiente de los buses: rosa y verde. Solo faltó una persona. Además del permiso de la autoridad competente, contamos con el del tiempo, como en los toros. No hizo frío y solo tuvimos pequeños episodios de lluvia, sobre todo cuando ya desfilábamos hacia Bakedano y al final en Estella.

 Creo que todos y todas disfrutamos de lo lindo de un paseo sumergido en un bosque increíble, arrullados por el sonido constante de los saltos de agua y extasiados por las figuras de las pequeñas cascadas y el intenso color de las pozas. Al principio sufrimos un pequeño desconcierto porque se nos dio unas indicaciones muy poco acertadas y perdimos tiempo, pero el personal, con muy buen criterio, aprovechó el impás para cargar energías, que con el madrugón el estómago reclamaba carburante. Después de pasar un primer tramo de pista correspondiente a la bajada, nos fuimos internando en la de subida a partir del pozo dos, dejando su visita para la bajada. A partir de aquí fuimos aprovechado el espectáculo del agua y la mayoría no se arrugó ante algunos pasos un tanto incómodos y arriesgados.


Cuando más estábamos entusiasmándonos nos topamos con una valla candada y un cartel que nos informaba que ya no se podía continuar la ascensión por razones de seguridad y de conservación del lugar, bajo multa de 600€. Lo que no esperábamos es que nuestros chóferes, conocedores de algún acceso por otro lugar, sí accedieron al surgente, no pagaron la multa y nos han cedido estas imágenes de lo que no pudimos disfrutar, por lo que les estaremos eternamente agradecidos. En fin, piratas pero de los buenos.


Tras la foto de grupo, imprescindible en estas ocasiones, se inició el descenso, dejando abiertas las opciones que se desearan seguir, solo que marcando una hora de llegada a la parada de buses. No se puede contar la cantidad de fotos de todo tipo que se realizaron, aprovechando los escenarios que en la subida se habían conocido. Como se había previsto, los que quisimos, bajamos a contemplar el espectacular pozo dos y su entorno de grietas y vegetación, aunque tuvimos que extremar el cuidado porque su acceso no era muy seguro y estaba mojado. Al entrar entrar en el pueblo, algunos aprovecharon que el bar primero ya estaba abierto para tomar algo. Claro que hubo quienes se lo tomaron con demasiado relajo y, como en toda excursión que se precie, no puede faltar el típico grupito que hace esperar al resto.


Nos dirigimos al camping de Iratxe, sito en pleno camino de Santiago y al pie de las míticas cimas de Monte Jurra, de grandes recuerdos históricos y políticos. Nada más iniciar la marcha se llamó a la cocina para que pusieran en marcha el arroz y parece ser que la paella estaba en su punto. En realidad, no es un camping al uso. Aquello parecía una urbanización con hotel, campos deportivos, equitación... así que los chóferes se las vieron para llegar al restaurante, teniendo que ejecutar maniobras propias de un examen de carnet. El servicio fue ágil y muy bien organizado. En cuanto a los menús parece ser que hubo pegas a cuenta del postre, pero por lo demás gustaron. No faltaron algunas canturriadas de las tradicionales en estas ocasiones. Llegó la hora de la recogida del dinero y cada cual pagó a su correspondiente coordinador o coordinadora. Es de agradecer y felicitar a todos y todas por haber facilitado este cobro trayendo los cambios preparados.


A partir de aquí nos dirigimos a dar una vuelta antes del regreso por la cercana e histórica población de Estella. Nos fuimos dispersando en pequeños grupos a lo largo y ancho del pueblo, buscando rincones pintorescos y admirando casonas, monumentos y grandes templos. Dan fe de ello las cuantiosas fotos que se fueron colgando en el grupo de senderismo. Esta vez no hubo que esperar a ningún rezagado, más bien, la mayoría estaba un cuarto de hora antes haciendo guardia en los bancos de la estación de autobuses. Y es que, entre el peso de la jornada y que el tiempo empezaba a ponerse pesado, había muchas ganas de volver a casa. El regreso fue rápido y sin problemas. En fin, creo que fue una jornada para el disfrute compartido, tal como estaba previsto. Pudimos ponernos cara entre los veteranos y los recién llegados y compartir experiencias. Al año que viene más... "pero no mejor, que es imposible" (con permiso de Guayomin)

Este es el explosivo surgente inicial




lunes, 16 de octubre de 2023

Tengo ganas de vomitar

"Yo escribí Hijos de la Ira lleno de asco ante la estéril injusticia del mundo y la total desilusión de ser hombre" (Dámaso Alonso 1944)



Dámaso Alonso, uno de mis poetas de cabecera, escribió esto después de la guerra civil y ante el espectáculo horrendo de la segunda guerra mundial. Hoy hago mías esas sensaciones ante los acontecimientos mundiales que están machacando a las partes más débiles de la población. Es indignante contemplar cómo, con  la disculpa del derecho de Israel a defenderse, se está culminando un genocidio que ya había comenzado desde que en 1948 surgió el estado sionista. Todo el occidente democrático y civilizado asiste a él como quien mira a otra parte y lo único que se les ocurre a algunos es ofrecerles más armas en vez de frenar esa atrocidad, como si eso contribuyese a conseguir la paz. La ONU está atada de pies y manos y pinta lo mismo que el papa Francisco pidiendo que cesen las hostilidades.

Es increíble tener que aguantar que ante la acción de Hamas, que personalmente no apruebo, se hayan levantado los países civilizados en bloque condenando el ataque terrorista ¿Dónde estaban todas las veces que Israel ha bombardeado población civil en Gaza? ¿Dónde estaban cuando a ido robando terreno, pasándose por el arco de triunfo los mandato de la ONU? ¿Dónde estaban en los ataques a las mezquitas, en los desalojos de los palestinos nacidos en Israel, en los campos de refugiados asaltados por su ejército? ¿Dónde estaban cuando se hizo con armamento nuclear, mientras que en Irak una mentira al respecto desató un guerra de dimensiones incalculables? ¿Dónde estaban cuando el jefe supremo del ejército israelí habló de animales humanos? Y suma y sigue.


La mejor defensa de Israel, y la única si de verdad quieren la paz y la seguridad de sus ciudadanos, tiene que consistir en acatar los mandatos de la ONU, respetar el derecho internacional, devolver lo robado a los palestinos y reconocer a un estado palestino con pleno derecho. Solo entonces los palestinos no van a necesitar brazos armados y podrán desarrollarse como país y como personas, a la vez que los palestinos residentes en Israel recobrarán sus derechos y su dignidad. Pero claro los halcones y los aguiluchos instalados en el poder quieren la paz del cementerio para la zona y, de paso, ocupar todo el territorio de Palestina. Creo que cuentan de sobra con el silencio de las potencias occidentales cuando lo consigan. Y, como contraposición, Rusia no estará para más líos o los países árabes mirarán, una vez más, para otra parte ante este conflicto que les escuece y, a lo más, sacarán un papel diciendo que están preocupados, o enfadados como mucho.


Por si esto fuera poco, hay otro genocidio en marcha que también viene de lejos, pero que está pasando totalmente desapercibido porque no afecta directamente occidente: el del pueblo armenio que ahora está sufriendo el exterminio por parte de Azerbayan, por si los armenios tuvieran poco con los turcos. Este lío viene en parte por el desmoronamiento de la Unión Soviética y Rusia se llama a andanas. Por la otra parte, a Occidente no le interesa meterse con Turquía que, no faltaba más, es miembro de la OTAN. O sea, que entre todos la mataron y ella sola se murió.


Por si me quedaba algún atisbo de respiro, tenemos que estar asistiendo en casa a este circo de títeres políticos aguantando la rabieta de las derechas por no poder tener el poder, que les da derecho de pernada para "el todo vale": mentir, insultar, calumniar y todo ello envuelto en un relato de realidad virtual inventada sin ninguna consistencia con la realidad, pero que parece que da votos. Tenía razón el  judío cuando dijo que la razón pinta muy poco a la hora de acertar en las votaciones. Y aquí el fuego de los sentimientos está servido entre la exaltación del nacionalismo español y el desprecio o el descrédito de los nacionalismos locales. Así que lo dicho, sigo con el estómago revuelto y voy a vomitar de un momento a otro.


lunes, 25 de septiembre de 2023

El regreso de las momias


Han salido de sus tumbas políticas, cada cual con sus prebendas bien aprovechadas, para hacernos ver que las cosas tal como van no les gustan. Y nos han proclamado a los cuatro vientos -prensa, radio, televisión y redes- sus soluciones y consignas, sin pararse a pensar que los tiempos y la sociedad han cambiado pero ellas no: sus negocios y sus entornos privilegiados mantienen también sus mentes embalsamadas. Una de las momias ha provocado que su partido tenga que hacer un manifestación de Madrid, engordada con autobuses gratis desde el extrarradio, para clamar contra algo que aún no se sabe ni si será ni cómo será. Total que siguen repitiendo lo que ya decían en el siglo pasado: España se rompe, la democracia se corrompe, vamos al desastre, filoetarras, váyase...  Las otras momias se han juntado para decir que su partido se atreve a llevarles la contraria y están indignados, pidiendo la cabeza de su dirigente por segunda vez. Parece que con los resultados de la vez anterior no han tenido suficiente lección y, una vez más, hacen el caldo gordo a sus contrarios.


En efecto, el tema de la supuesta amnistía para los dirigentes independentistas catalanes levanta ampollas, sobre todo a los nacionalistas españoles sean azules o rojos. Ahora resulta que, por arte de birle y birloque, el que está reclamado por la justicia es el que va a imponer las condiciones para que la posible coalición  alternativa al PP sea posible. Este filibustero de la política también me resulta una persona repugnante por mentiroso y cara dura, que después de la farsa que montaron cuando vio las orejas al lobo, se fue de rositas, hizo que los suyos le llamaron exiliado -cuando no era más que un cagueta que no quiso dar la cara como otros de los suyos- y le estén rindiendo una incondicional cortesía. Tengo que reconocer que a mí también me fastidia que se vaya a salir con la suya.


He escuchado decir al señor Rajoy, otra de las momias participante en la manifestación de hoy, que lo único que funcionó en Cataluña fue el artículo 155. D. Mariano, por favor, no vuelva a insultar nuestra inteligencia. No nacimos ayer y no es de recibo que llame solución el fiasco que montaron, que hizo que España hiciera un ridículo espantoso a nivel internacional. Usted no quiso hacer nada y apeló a dicho artículo y a no sé qué leyes decimonónicas, así le pasó la patata caliente a los jueces y a un coronel de ultraderecha al mando de la tropa, que entró como un elefante en una cacharrería. Usted quedó también en evidencia cuando se comprobó que las legislaciones de diversos países europeos no tenían referencia de dichas leyes y así los jueces no pudieron traerse al filibustero para aplicárselas. Así que podemos aplicar aquí lo de "de aquellos polvos estos lodos". Creo que sí han funcionado las otras medidas de perdón a los dirigentes que se quedaron aquí. En realidad, los dirigentes independentistas no tenían que haber entrado en prisión, cuando se les podía aplicar otro tipo de medidas más acordes con la política, evitando el martirologio que se montó a su costa. De hecho el independentismo catalán ha perdido fuelle desde entonces. Igual van a echar de menos a Rajoy o los duros del PP que puedan asumir el poder.